Encontramos una ciudad cuya panorámica la hace tan bonita como inconfundible. Sus puentes y su basílica, la del Pilar, de elevadas torres y coloridas cúpulas vidriadas, se miran al espejo fruto de su existencia, el río Ebro.
Una ciudad de grandes eventos, donde la torre del agua, como una atalaya más, observa paciente desde los límites de la ciudad la próxima gran hazaña de la ciudad del cierzo. Una ciudad de leones por sus habitantes, donde más vale maña que fuerza. Una ciudad de sabores, donde cerveza y comida se unen para crear experiencias únicas. También una ciudad de naturaleza y de paz, en el parque con un nombre acorde a la grandeza del mismo, José Antonio Labordeta, lo que deja ver que es una ciudad de grandes personajes: músicos, cineastas, fotógrafos, políticos, actores, escultores… y pintores también. En conclusión, una ciudad de las artes, donde pintura, fotografía, escultura, danza, música y cine se potencian a las generaciones más jóvenes. Una ciudad donde todo el mundo tiene cabida y en cuyos espacios se puede disfrutar del ocio diario que le da tanta vida. Pero, sobre todo, una ciudad de historia, con un importante legado de las diferentes civilizaciones que vivieron aquí y donde cada rincón esconde algo por lo que merece la pena pararse a escuchar.
¿No sabes de qué ciudad hablamos? Muchas letras la convierten en única. La D, de Devota, la J, de Jota, la M de Mudéjar. Y la última letra del abecedario, la que más énfasis aporta, la Z, de ziudad. La Z, de Zaragoza.
Muchos son los que piensan que Zaragoza tiene el Pilar y poco más. Pero si quitas el velo que cubre esa creencia, puedes llegar a encontrar verdaderas maravillas en este nuestro lugar.
La Plaza del Pilar, la plaza de La Seo y la Plaza de Césaraugusto, los lugares donde todo se junta: el ayuntamiento, el museo del Alma Mater, la lonja, el homenaje a Goya, la fuente de la hispanidad, la iglesia de San Juan de los Panetes, la torre de la Zuda, las murallas, el mercado central. Pero, sobre todo, las dos catedrales: la Basílica-Catedral de Nuestra Señora del Pilar y la Catedral de San Salvador o La Seo de San Salvador, un lugar que te sorprenderá absolutamente.
Pero hay mucho más allá del mero centro de la ciudad. La iglesia parroquial de San Pablo, de estilo gótico-mudéjar y declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El palacio del Aljafería, actual sede de las cortes de Aragón. El parque grande José Antonio Labordeta, donde numerosos monumentos fascinantes se esconden entre sus verdes caminos, o los galachos de Juslibol, un espacio natural único situado a las afueras de la ciudad. El EMOZ (Escuela Museo de Origami de Zaragoza) el primer museo de Origami de Europa. O el acuario fluvial de Zaragoza, el más grande de Europa.
El Caixaforum, donde poder ver maravillosas exposiciones itinerantes. El museo provincial en la Plaza de los Sitios, un curioso lugar donde se celebró la exposición hispano francesa del año 1908. E incluso, el estadio de la Romareda, la casa del Real Zaragoza, pegado al Auditorio de Zaragoza, edificio con una enorme sala hipóstila que alberga una de las salas con la acústica envidiable, comentado por el mismísimo Daniel Barenboim pianista y director de orquesta argentino.
Esto y mucho más te espera en Zaragoza.
En Zaragoza te ofrecemos dos opciones fantásticas para disfrutar de la ciudad.
Como si de un menú del día se tratara, el tour esencial, diurno, te acercará a los monumentos imprescindibles del casco histórico de la ciudad. Todo aquello que se encuentra entre la orilla del Ebro, donde la basílica asoma la cabeza para verse reflejada, y la Plaza de España. De la mano de Alejandro y Alba, guías locales, músicos, habladores, historiador del arte y conservadora y, sobre todo, bien de maños te enseñarán la ciudad, su historia (la ciudad de las cuatro culturas), su gastronomía (pasando por el tubo) sus curiosidades (expresiones, gentilicios extravagantes) e incluso sus canciones, de la forma más amena y divertida posible. Además, entraréis en sitios maravillosos como el Mercado Central o la Basílica del Pilar.
Estar muy atentos, puesto que hay un concurso de preguntas y un posible premio final está en juego…Por otro lado, como segundo plato o postre, cuando el sol se esconde y la luna hace acto de aparición, el tour de mitos y leyendas te permitirá conocer aquellas historias que convierten a la ciudad de Zaragoza en un lugar triste, tenebroso y mágico a la vez. Un lugar donde lo pagano y lo religioso se junta en uno solo. Atrévete a conocer y a divertirte en esta visita nocturna llena de sorpresas, acompañado de Bécquer o Francisco de Goya “steampunk hípster”. Tu alma estará protegida…o igual…no tanto. Ven con nosotros y déjate impresionar por esta ciudad, ¡Zaragoza!
